I'm back

Bueno, bueno ..... pues ya estamos por aquí otra vez.

Han pasado muchas cosas desde mi último post, a saber: me he casado , me he mudado y ahora resido en otra ciudad, más pequeña, más entrañable, y mucho, mucho “más mejor”.

Pero no son mis andanzas las que me han traido por estos lares, sino las de mi muy querido primo pequeño, que se casa este fin de semana. (los siento por su club de admiradoras, pero ya esta cazado y bien cazado)

Que quereis que os diga, le sienta bien al pimo esto de casarse. Esta más asentado, se le nota más feliz y es mucho mas gracioso, aún si cabe, desde que tomó esta decisión.

Dios mediante, la ceremonia se celebrará este sábado en una preciosa hermita de un, no menos precioso, pueblo de la sierra de Cameros, donde hace ya más de 60 años que nuestros muy queridos abuelos se casarón y donde no hace ni tres meses (los hará el día de la boda) que me casé con quienes ustedes recordarán como mi “muy querida novia” , ahora mi muy muy querida esposa.

Seguro que todo estará perfecto, ya que todo el mundo ha puesto sus mejores intenciones en ello y si mi pimo y su futura se acuerdan de llevar unos huevos a las clarisas, seguro que además tenemos buen tiempo.

No es de eso, de lo bien que seguro va a salir todo, de lo que queria hablarles, ni de lo contento que está todo el mundo, sino de la alegría que me produce ver a mi pimo encaminado.

Yo soy el pequeño de mi familia, y como tal nunca me he sentido responsable de ningún hermano pequeño ni nada por el estilo. Es con mi muy querido pimo, con el que a veces siento lo que se supone deben sentir los hermanos mayores. Desde el hastío que me producía el que repitiese hasta la eternidad lo que yo hacia, hasta la necesidad de interceder por él cuando, por supuesto, no lo necesita.

Me hace ilusión que se case, y más aún que lo haga con “culo” a quién quiero tanto. Tengo ganas de que sienta eso que yo hace tan poco tiempo sentía al estar esperando en el altar a mi muy my querida esposa, esa sensación de estar arropado por todos los tuyos, esa claridez con la que se percibe lo querido que es uno por su gente, ese subidón al ver a la novia....

En fin, que aunque “haga cagar” a más de uno con estas manifestaciones tan sentimentales espero disfrutarlo tanto como lo hice en mi boda, con el aliciente de no estar pendiente y la tranquilidad de que todo va a salir fenomenal.

Enhorabuena pimos!!!!!!!!!!